domingo, 1 de junio de 2008

¿Cómo enseñarle a dormir a nuestros bebés?




El bebé, no nace sabiendo dormir, ya que este es un hábito que va a ir aprendiendo desde sus primeros días de vida.

Existe un alto porcentaje de niños que tienen problemas para dormir. Esto se debe a que no han adquirido bien este hábito.
El recién nacido no distingue entre día y noche. En el útero materno pasaba horas durmiendo y otras despierto, alternativamente, sin horarios preestablecidos.

Cuando el bebé nace, son los padres los que deben enseñarle a dormir. Todos los bebés saben dormir, pero no todos saben hacerlo bien. A partir del tercer o cuarto mes algunos niños pueden dormir de corrido toda la noche y otros se despiertan varias veces.

El recién nacido suele despertarse cada 3 ó 4 horas, a veces cada 2 ó 3 horas para comer. En ese lapso de tiempo el niño se despierta, es alimentado, se le cambia el pañal y se vuelve a dormir. Esto es lo más común pero hay niños que no tienen parámetro horario y pueden dormir hasta 16 hs diarias.

El niño se adapta a períodos más largos de tiempo llegando al tercer o cuarto mes de vida. Generalmente ahí cambia su ritmo biológico, porque el bebé va madurando en la medida en que su sistema nervioso central incorpora estas funciones. Esto no es igual para todos, hay quienes lo logran más tarde.

Vacunas para bebes




La evolución de las vacunas
Desde el primer intento de vacunación realizado por Eduard Jenner en el año 1796, el desarrollo de las vacunas ha sufrido una evolución notable. En efecto, tanto una mejor calidad de vida, como el significativo incremento de la esperanza de vida en muchos países del mundo, tienen a las vacunas como uno de los principales eslabones de la cadena que han permitido estos resultados. Gracias a las vacunas, enfermedades como la polio y la viruela son en la actualidad sólo un recuerdo. Estos antecedentes demuestran que la vacunación es una forma de prevención que, bien utilizada, permite desterrar enfermedades, evita consultas, tratamientos médicos, estudios de laboratorio, internaciones, secuelas y el elevado costo en vidas y recursos asociado.

Las primeras comidas del bebé




0-6 meses
La alimentación ideal en los primeros 6 meses de vida es la leche materna de manera exclusiva. Es decir, únicamente pecho.

Se ha demostrado, mediante estudios realizados en las últimas décadas, que la lactancia materna posee los mayores beneficios, ya que protege al bebé de muchísimas infecciones y se reconoce una disminución de diarreas, otitis, catarros y alergias en los bebés alimentados de esta forma. No hay ningún otro alimento que pueda imitar sus cualidades.

La lactancia no sólo beneficia al bebé, también beneficia a la madre, ya que permite que el útero recupere de manera más rápida su tamaño normal. Esto le permite a la mujer recuperar el cuerpo que tenía antes del embarazo.
Si por algún motivo la lactancia natural no fuera posible, el bebé debe tomar leche de fórmula, maternizada (leche de vaca modificada y enriquecida similar a la leche materna) durante sus primeros seis meses